El concejal de Obras Manuel Moya informa que en la calle Blasco Ibáñez se ha ampliado la acera derecha del sentido de la circulación hasta 2 m. de ancho, conectándola con la calle Vall y se ha sustituido la red de agua potable. La acera de la izquierda se ha modificado para delimitar la zona de aparcamiento y se han plantado 3 árboles, continuando la línea de arboleda de la calle Llavador. Las obras se completan con el asfaltado de 1.350 m2 y el marcado del vial y de los aparcamientos. A los efectos de aparcamientos, se ha tenido en cuenta aprovechar al máximo el espacio, de manera que la ampliación de aceras y situación de los contenedores de residuos y servicios de taxi, que ya existían, afecten lo menos posible al aparcamiento. A tal fin se limitará el horario de la parada de taxis, pero era necesaria con ese ancho para poder dar un servicio correcto a los usuarios que con anterioridad tenían problemas de acceso por la estrechez de la parada. También se señalizan las zonas de carga y descarga para dar un servicio adecuado al comercio de la zona. Igualmente se han señalizado los pasos de cebra para dar una mayor funcionalidad a los distintos cruces peatonales en la zona de la Morquera.
En la calle Primero de Mayo se han sustituido los bancos de piedra por 6 bancos de madera a dos caras y con respaldo, más cómodos para el uso de los vecinos.
En la calle Carmen se ha actuado en la ampliación de una acera de unos 28 m2 para mejorar la circulación en este punto estrecho. Finalmente se ha actuado en la calle Canónigo Manchón demoliendo una rampa existente para mejorar la pendiente y las escaleras, asfaltando posteriormente todo este tramo de calle.
Manuel Moya indicaba que estas actuaciones, de las que estaba muy necesitada esta zona tan transitada por todos los crevillentinos y visitantes, presenta ahora un aspecto totalmente renovado y con mayor calidad para los vecinos, que es lo que se pretende con estas intervenciones municipales en los distintos puntos de nuestra población.