La archivera municipal, Bibiana Candela, explica que “resulta difícil encontrar el rastro de la mujer en la documentación conservada en los archivos y concretamente, en el Archivo Municipal, si bien, no podemos olvidar que los estudios sobre la mujer son relativamente recientes”.
“No obstante, hay algunos ejemplos de mujeres mencionadas en la documentación y que ha llegado a nuestros días. Así, podemos encontrar mencionadas desde las nodrizas, encargadas de amamantar a los niños huérfanos o pobres, parteras y sobre todo, las maestras de escuela”, comenta Candela.
Es el caso del nombramiento como maestra de párvulos de Teresa Sanz Porqueras, cuyo título fue expedido por el Director General de Instrucción Pública, Vicente Santamaría de Paredes, el 18 de diciembre de 1897, con un sueldo de 1.100 pesetas anuales.
En esos momentos, Crevillent contaba con una escuela de niños en la calle de la Bodega (Médico Lledó); la de niñas, una en la calle Nueva o Corazón de Jesús, desde donde se trasladaría al número 5 de la Plaza Vieja, buscando mejores condiciones higiénicas, de ventilación y luz, y otra en la calle San Miguel, sustituida por los mismos motivos por otra en la calle Pelota (Ramón y Cajal). Mientras, la escuela de párvulos se hallaba en la calle San Pascual, pero el elevado número de alumnos -sobrepasaba los ciento sesenta-, provocaron su traslado al número 23 de la calle Abrevadero.
Las plazas de maestro se proveían por oposición, siendo una de las condiciones para el desempeño del cargo “la buena conducta religiosa y moral”. Tenían derecho a vivienda, normalmente en el mismo edificio de la escuela.
Teresa Sanz Porqueras obtuvo el título en la Universidad de Valencia y tomó posesión ante el Alcalde de Crevillent, Manuel Magro, y el Secretario del Ayuntamiento, Francisco Baeza Puig, el 2 de abril de 1898.
La archivera municipal recuerda que el Archivo Municipal lleva el nombre de Clara Campoamor en homenaje a esta mujer, escritora, política y defensora de los derechos de la mujer española. Impulsora del voto femenino en España que se logró en 1931 y que ejercido por las mujeres por primera vez en el año 1933.